El lunes pasado el Departamento de Seguridad Nacional DHS del actual gobierno de Biden, anunció una nueva medida que reanudará las deportaciones o remociones expeditas en contra de algunos grupos familiares que entran a los Estados Unidos por lugares no autorizados.
Esta nueva medida que es similar a la del pasado gobierno de Trump, hará la vida muy difícil a las familias que solicitan el asilo político que temen regresar a sus países.
Parece que después de mucha presión de parte de los republicanos que constantemente están hablando de una crisis en las fronteras el presidente Biden ha caído en la trampa y en lugar de hacer el proceso de asilo más formal y proteger a los solicitantes, en lo que supuestamente están trabajando, está haciendo la vida más difícil para los solicitantes de asilo.
Con esta medida prácticamente les dan poder a los oficiales de la patrulla fronteriza para ser policías y juez al mismo tiempo, o sea, en otras palabras ellos mismos dirán si las personas tienen base para pedir el asilo.
Las familias siempre pueden insistir en que tienen miedo de regresar a sus países y pedir el asilo, pero mientras son detenidos los mismos oficiales que los arrestan serán quienes decidan si se merecen o no una oportunidad frente a un oficial del asilo.
Sabemos que estos oficiales de la patrulla fronteriza o del ICE no tienen el conocimiento, ni la experiencia, ni la actitud para tomar una decisión tan importante para estas personas y vamos a ver como muchas familias, que tienen buenas razones para huir de sus países y que quizá califican para el asilo, serán removidas inmediatamente de los Estados Unidos.
Como dije anteriormente, los que están en la mira son las personas que pretenden cruzar sin permiso o sin inspección, lo que es muy peligroso, y según el gobierno de Biden, quiere evitar estas situaciones de peligro. El problema es que no hay otra forma que sea rápida y eficiente para que las personas puedan entrar a los Estados Unidos a pedir el asilo.
Estamos exigiendo que el presidente Biden y su administración cambien esta decisión que perjudica a las familias pidiendo asilo y que sigan trabajando en facilitar un programa de asilo más justo y más rápido.
Si continúan cometiendo los mismos errores del pasado gobierno de Trump y otros políticos al solamente deportar y remover a las personas, no va a mejorar la situación y solo causarán más daño y sufrimiento a los inmigrantes.
Estamos pidiendo especialmente ahora que estamos celebrando los 70 años de la Convención de Refugiados de las Naciones Unidas, que los Estados Unidos implemente soluciones como trabajar con organizaciones comunitarias para apoyar a los inmigrantes pidiendo el asilo y eliminen esta nueva política lo más pronto posible.
Richard Kessler, es un Abogado con 40 años
de experiencia, especialmente en el área de Inmigración.
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