El jurado en el caso de los tres hombres acusados de la muerte del hombre afroamericano de 25 años de edad, Ahmaud Arbery, declaró culpable a los culpables.  Una decisión responsable y muy diferente a la del Caso de Kyle Rittenhouse en Wisconsin.  Pese a que el jurado estaba compuesto por una abrumadora mayoría blanca, los resultados fueron imparciales.

Los tres individuos, Greg y Travis  McMkichael y Roddie Bryan, se abrogaron el derecho a actuar como policías. Intentaron detener a alguien por simple sospecha, o mejor dicho, porque era un negro corriendo en un barrio de blancos.  La defensa alega que se trató de un “Citizen Arrest”, una figura jurídica de algunos estados en lo que se permite a un ciudadano arrestar a otro cuando éste está cometiendo un delito. Okay… ¿Y que delito estaba cometiendo la víctima en el momento que lo mataron?  ¿Resistirse a que tres desconocidos armados lo agarren?

¡De todo veréis en la viña del señor!

 

El veredicto del jurado en el caso de Kyle Rittenhouse no es solo una vergüenza, es un peligroso mensaje a la comunidad.  De acuerdo a ese veredicto, cualquier mozalbete puede salir a la calle armado hasta los dientes y matar a todo el que lo intente detener.  ¿Algún parecido con el viejo oeste americano? Sin dudas.

Después de ese veredicto, los supremacistas blancos se van a meter en las protestas de los afroamericanos a intimidarlos, y dispararles si alguno se le acerca.  Así es que, desde ahora en adelante salir a la calle a protestar en este país, dejó de ser un derecho.

 

Saliendo del patio, se celebraron las elecciones en Chile y el que más votos sacó fue el candidato de la ultraderecha, José Antonio Kast.  Este señor nunca ha disimulado su admiración por el exdictador Augusto Pinochet. Es un activo miembro del Movimiento Católico Conservador Schoenstatt. Hijo de uno de los oficiales nazis que se refugiaron en Sudamérica tras la caída de Berlín en 1945.  Por ahí podemos deducir a dónde va este mundo. ¡Qué le espera a las próximas generaciones!

¡Qué el Señor nos encuentre confesados!

 

También el domingo pasado se llevaron a cabo elecciones en Venezuela para elegir gobernadores y resultó ganador el partido oficialista ¿Hubo fraude? Lamentablemente para los señores Juan Guaidó y Anthony Blinken, en el escrutinio participaron centenares de observadores internaciones, tanto del Centro Carter como de la Unión Europea, y todos coincidieron en que no hubo irregularidades.  Algunos opositores han dicho que no obstante, la abstención fue muy grande.  Puede que si, pero no es nada diferente a las elecciones provenzales de ningún país, incluso hubo mas participación que en las de Estados Unidos. Sorry…

 

Hablando de Venezuela, que es un productor de petróleo de la OPEP, los precios de los combustibles están subiendo y van a subir más, como lo habíamos dicho hace meses.

El presidente Biden puso la barba en remojo y autorizó el uso de las reservas del crudo.  Venezuela pudo haber sido favorecida con esto, pero con el embargo que le puso Estados Unidos los venezolanos, excepto Guaidó, no podrán disfrutar de la fiesta. ¡Cosas de la política!

 

Nos vemos en los próximos jalapos, si la virgencita lo permite.