Grand Rapids, Michigan. - Según la Skin Cáncer Foundation uno de cada cinco estadounidenses desarrollará cáncer de piel a la edad de 70 años; y sólo en Michigan para el 2021 se estima que habrá 3,440 nuevos casos de esta enfermedad, según datos suministrados por la Sociedad Estadounidense del Cáncer.

Es por eso que Mercy Health Physician Partners Lakeshore Family Care recomienda tomar una serie de medidas para mantener a salvo el órgano más grande del cuerpo, ya que el clima del verano está comenzando a llegar al oeste de Michigan, trayendo temperaturas cálidas, abundante sol y días más largos.

Los rayos ultravioletas del sol pueden dañar la piel desprotegida y provocar no solo un envejecimiento prematuro de la piel, sino también crecimientos cutáneos no cancerosos y cánceres de piel potencialmente mortales.

No se tiene que evitar el sol por completo, simplemente limitar la exposición a los rayos ultravioletas, porque no hay rayos ultravioleta ni bronceado seguro.  Hay dos formas de energía radiante en los rayos ultravioleta que pueden dañar su piel y causarle cáncer. Estos son los Rayos UVA y rayos UVB.

Los rayos UVA están asociados con el envejecimiento y los UVB con las quemaduras solares.

Cuando estás bajo el sol, tu piel produce naturalmente vitamina D. Los rayos UVB permiten que el cuerpo produzca vitamina D, que es esencial para la salud en general. Sin embargo, también pueden quemar la piel y causar daños que conducen al cáncer de piel.

Tomar suplementos de vitamina D y obtenerlo de su dieta son dos formas adicionales de obtener esta vitamina sin aumentar el riesgo de padecer dicha enfermedad.

 

 

Consejos fáciles para la seguridad solar

Preste atención a la temporada, la hora del día, la elevación y el clima. El índice UV indica qué tan fuertes son los rayos UV en su área en un día en particular. La escala es de 1 a 11+. Con un número más alto significa que hay un mayor riesgo de exposición a los rayos UV.  La forma más segura de limitar la exposición es permanecer a la sombra.

Hay que tomar en cuenta que los rayos ultravioletas son más fuertes en primavera y verano, sobre todo al mediodía, entre las 10 a las 16 horas, cuando las elevaciones son más altas.

También es importante tomar precauciones los días donde con nubes y neblina, porque los rayos ultravioletas pueden penetrarlas. De igual modo la exposición al sol puede ocurrir a través de ventanas, incluso polarizadas, que se pueden encontrar en automóviles, aviones y hogares.

Los rayos ultravioletas también se reflejan en superficies como arena y pavimento. Penetran en el agua y también se reflejan.

Aplicar protector solar y bálsamo labial

Tenga en cuenta que el protector solar es un filtro; no bloquea todos los rayos ultravioletas. Al adquirirlo, lea la etiqueta con atención para saber lo que está comprando y siga las instrucciones teniendo en cuenta que algunos productos pueden irritar la piel.

Si está usando protector solar de un año anterior, asegúrese de que no haya estado expuesto al calor.

El factor de protección solar (SPF) es un número que indica el nivel de protección que proporciona el protector solar contra los rayos UVB únicamente. SPF no indica nada sobre la protección UVA.

Cuanto más alto sea el número mayor será la protección contra los rayos UVB. Sin embargo, no crea que puede permanecer más tiempo al sol con un número de SPF más alto y aplique el protector solar al menos cada dos horas.

Los protectores solares pueden desaparecer al nadar, sudar o usar una toalla. Incluso el protector solar “resistente al agua” puede necesitar volver a aplicarse con frecuencia.

No olvide aplicar el protector solar en sus oídos, la parte delantera y trasera de su cuello y la parte superior de sus pies, y aplique también bálsamo labial con SPF.

 

Los protectores solares etiquetados como "protección de amplio espectro" protegen contra los rayos UVA y UVB. La Sociedad Estadounidense del Cáncer los recomienda con un SPF de 30 o más para una máxima protección.

Protéjase con ropa y accesorios

Mercy Health Physician Partners Lakeshore Family Care recomienda un sombrero con alas de 2 a 3 pulgadas alrededor, o una gorra de sombra que también proteja su cuello, rostro y cabeza.

Para proteger sus ojos y la piel que los rodea se recomiendan los anteojos de sol que bloqueen los rayos UV y tengan la etiqueta "Absorción de rayos UV hasta 400 nm" o "Cumple con los requisitos de UV ANSI".

Esto significa que las gafas bloquean al menos el 99% de los rayos ultravioleta.

Cubra la mayor parte de piel posible vistiendo camisas con mangas largas y faldas o pantalones largos.

Las telas de tejido apretado en colores oscuros bloquean más los rayos UV que otro tipo de ropa, sobre todo cuando se secan. Por eso los fabricantes de ropa han desarrollado prendas ligeras con valores de factor de protección UV (UPF), que ofrecen protección incluso cuando están mojadas.

La escala UPF es de 15 a 50+, cuanto mayor es el número, mayor es la protección contra los rayos UV. Siga todas las instrucciones de lavado cuidadosamente.

Compruebe si hay cambios en la piel

Una herramienta sencilla para evaluar una nueva lesión cutánea es recordar los ABCDE del melanoma.

Si nota alguno de los cambios que se enumeran a continuación hable con su proveedor de atención primaria (PCP), ya que estos indican una mayor probabilidad de cáncer.

  1. Asimetría: la lesión no se ve igual en ambos lados
  2. Bordes: bordes irregulares que no son lisos ni redondos.
  3. Color: tonos más oscuros o múltiples
  4. Diámetro: tamaño mayor que el borrador de un lápiz
  5. Evolución: la lesión está cambiando de alguna manera.