Continúan los tiroteos masivos. Este miércoles se produjo el número 62 en lo que va de año. En esta ocasión, 9 personas murieron en San José, California. El victimario fue un hombre de 67 años de edad, empleado del lugar donde llevó a cabo su fatal acción: una estación de tren.
Esto ocurre precisamente un día después de que el gobernador de Texas firmara una ley para permitir el porte de armas sin tener que sacar permiso. Lo que quiere decir, que seguiremos escuchando noticias de más tiroteos y más muertes.
Eso demuestra que este país está lleno de políticos irresponsables y corruptos, pues el afán de permitir la compra libre de armas es el producto de los sobornos que pagan los fabricantes de armas a través de su organización, Asociación Nacional del Rifle. ¿Soborno? Si, porque aunque no le dan dinero a los políticos directamente financian sus campañas electorales haciendo propaganda contra los candidatos contrarios. ¡Viva la democracia!
Señores, esta semana que pasó se cumplió un año de la muerte de George Floyd, el afroamericano que falleció debido a que un policía de Minneapolis le puso la rodilla en el cuello hasta que dejara de respirar. El oficial, Dereck Chauvin fue encontrado culpable de homicidio y será sentenciado en junio. La muerte de Floyd fue el detonante de las protestas contra la brutalidad policial. Ojalá que eso no pase al olvido y como las matanzas con las armas no sea solo mucha bulla, mucho figureo de los políticos y mas nada.
Cambiando de tema, la verdad es que la sociedad americana es intrínsecamente, hipócrita. De cualquier tontería sacan una ofensa. Es cierto que la legisladora republicana, Margorie Taylor, es una persona grosera y de menta torcida, pero la comparación que ella hizo de Hitler con los judíos para expresar su oposición contra las restricciones del Covid, fue absurda pero no una “ofensa al pueblo israelí” como están pregonando los políticos de los dos bandos.
Lo interesante de esto es, que esos mismos ofendidos apoyan los crímenes que está cometiendo el gobierno de Israel contra los palestinos. ¡Eso no es ofensa!
¡De todo veréis en la viña del Señor
Hablando de políticos cabeza hueca, al presidente Joe Biden, es decir Doña Julia, le va a pasar lo mismo que al que escupe para arriba: que le cae la saliva en la cara. El hombre, como auténtico gringo que creció viendo las películas en las que los rusos y los chinos son los chicos males, ordenó investigar si el Covid-19 salió de un laboratorio de China, pese a que ya expertos de la ONU, Europa, el propio Estados Unidos y la misma China, han dicho que la razón mas probable es que haya sido transmitido de un animal a un humano.
Si la idea es acusar a China de crear armas biológicas, mala cosa, porque el mayor fabricante de armas químicas y biológicas del mundo es Estados Unidos. Armas que usó en la guerra de Vietnam y para destruir las plantaciones de caña en Cuba en los 60s. Y armas, que todavía almacena.
Por cierto, que parece que el plan de Biden de tener el 70 por ciento de la población adulta vacunada contra el Covid para septiembre de este año, se va a quedar corto. Pues un estudio hecho por la organización Kaiser encontró que el 35 por ciento de los americanos dice que no se va a vacunar. ¿Razones? Muchas. Unos dicen que no creen que existe el Covid, otros que es un plan de dominación de un grupo, y otros que temen a las reacciones, entre ellas convertirse en cococrilos. ¡Oremos!
Nos vemos en los próximos jalapos si la Virgenita lo permite.
