SANTO DOMINGO, República Dominicana (AP) — Decenas de haitianos protestaron el miércoles en la embajada de Haití en Santo Domingo para demandar que su gobierno les emita documentos de identidad de forma gratuita para poder acogerse a un plan de regularización migratoria que ofrece por tiempo limitado República Dominicana.
Las autoridades haitianas "saben que la mayoría (de inmigrantes) no tiene posibilidad de conseguir los fondos" para pagar por los documentos, dijo a The Associated Press William Charpentier, dirigente de la organización no gubernamental Mesa para las Migraciones y quien participó en la protesta.
El embajador de Haití, Fritz Cinéas, anunció el martes la inminente puesta en marcha de un plan especial para proveer de documentos de identidad a los miles de haitianos que viven y trabajan en República Dominicana sin permiso migratorio.
Aunque no existen estadísticas oficiales, una encuesta de Naciones Unidas estimó en 2013 que cerca de 500.000 haitianos viven en República Dominicana, la mayoría de ellos sin ese permiso migratorio.
Cinéas dijo que a través de consulados y unidades móviles que aún no llegan a República Dominicana, su país se prepara para documentar por primera vez a unos 300.000 migrantes.
Mediante ese plan, el gobierno haitiano reducirá las tarifas a fin de cobrar 2.500 pesos dominicanos (unos 60 dólares) por la emisión de la copia del acta de nacimiento, credencial de elector y pasaporte. El precio normal sólo del pasaporte es de 80 dólares.
Charpentier recordó que muchos trabajadores migrantes haitianos, como albañiles y peones, ganan apenas unos 200 pesos (4,65 dólares) por día para mantener a sus familias y les es difícil ahorrar para tramitar los documentos.
El objetivo del proyecto forma parte de un acuerdo con el gobierno dominicano y será financiado con apoyo de organismos internacionales a fin de que República Dominicana regularice a los inmigrantes, dotándolos de permisos temporales de trabaja o con residencia legal, según las características de cada uno.
Ramón Fadul, ministro dominicano de Interior, ha insistido que los inmigrantes que no regularicen su estatus a más tardar en mayo del 2015, serán deportados.
El plan de regularización comenzó el 1 de junio, con 10 años de retraso desde que fue ordenado por la ley de migración del 2004. Su puesta en vigencia fue acelerada luego de que así lo ordenó el Tribunal Constitucional en 2013 y determinó en una polémica sentencia abrir juicios individuales para anular la nacionalidad dominicana de los hijos de inmigrantes sin permiso de residencia.
De forma paralela al plan de regularización, el gobierno dominicano tiene previsto crear otro programa para revalidad la nacionalidad de los hijos de inmigrantes que estuviesen a punto de perderla por la decisión del Tribunal.
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