SANTIAGO, Chile (AP) — La presidenta Michelle Bachelet anunció el jueves un aporte extraordinario de 36 millones de dólares a la educación pública, un día después de que el gremio de los maestros y dirigentes estudiantiles criticaran el enfoque de la reforma educacional impulsada por la gobernante.
En una escuela de una barriada periférica Bachelet dijo que la reforma debe acompañarse de una "agenda corta", porque los alumnos del sector público y sus familias no pueden esperar mucho tiempo por "medidas potentes que impacten en lo inmediato en la calidad de la educación".
Dirigentes del profesorado y de los estudiantes secundarios y universitarios consideran que Bachelet debió haber empezado la reforma por la enseñanza pública y no por la particular subvencionada, que es financiada por aportes estatales y familiares. También demandan una participación real en la preparación de los proyectos de ley.
Los fondos anunciados por Bachelet se entregarán el segundo semestre y podrán destinarse a pagos atrasados de fondos previsionales, que fueron descontados de los sueldos del magisterio por sus empleadores --las municipalidades-- pero no se ingresaron a las administradoras de pensiones.
Los primeros 1.500 millones de pesos, 2,7 millones de dólares, se destinarán a mejoras en infraestructura de escuelas que se lloverán con las aguas invernales y a terminar obras pendientes del terremoto de febrero de 2010.
Bachelet llegó al poder en marzo con un programa basado en tres grandes cambios estructurales: a la educación, los tributos y la constitución.
La reforma tributaria avanzó en la Cámara de Diputados y ahora debe discutirse en el Senado, y se da por descontada su aprobación porque la coalición oficialista de centroizquierda tiene mayoría; la constitucional aún no se inicia y la educacional se enfoca en la educación cofinanciada.
Los 8.200 millones de dólares que se espera recaudar con la reforma tributaria se destinarán mayoritariamente a los cambios en la clasista educación chilena. Los 36 millones de dólares anunciados el jueves provienen de fondos de apoyo a la educación municipal.
La reforma educacional busca una enseñanza pública, gratuita y de calidad, y revertir el legado de la dictadura militar, 1973-1990, que en 1981 traspasó la gestión de los colegios públicos del Estado a las municipalidades, que mayoritariamente son pobres o de ingresos medios, lo que originó distintas calidades de enseñanza.
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